La depresión es una enfermedad que no entiende de edad, sexo o ideología. A día de hoy, supone un problema de salud importante para nuestros mayores, ya que son muchas las personas que la sufren, o la han sufrido en algún momento, durante la última etapa de su vida.
Sin ir más lejos, la depresión y la demencia son las enfermedades más comunes en adultos mayores. Al llegar a una cierta edad sus funciones mentales y físicas sufren un deterioro que provoca que no desarrollen sus tareas cotidianas con normalidad y, por tanto, afectan a su organismo. Evitar la depresión en adultos mayores supone anticiparnos a las señales.
No es fácil detectar la depresión en personas mayores y los síntomas pueden pasar inadvertidos al principio: falta de apetito, tristeza, dificultad para dormir… Una correcta atención es esencial para que mejoren estos síntomas. A continuación te damos una serie de pautas para poder evitar la depresión en adultos mayores.
Claves para prevenir la depresión en adultos mayores
- Ejercicio Físico: Ya sabemos que el ejercicio físico es bueno para todo. Además de estimular la mente, ayuda a tener una buena autoestima y produce sensación de bienestar. Las actividades al aire libre, sobre todo, son muy beneficiosas para los mayores, ya que ayudan a relacionarse con otras personas y estar en contacto con la naturaleza y el entorno. Salir a pasear, sin ir más lejos, es el mejor antídoto para equilibrar cuerpo y mente.
- Alimentación Saludable: Una buena alimentación ayuda a tener un buen estado de ánimo. Existen alimentos que ayudan a combatir los estados depresivos y que son muy recomendables para subir el ánimo. Incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D, las grasas vegetales, los que contienen alto grado de hierro y magnesio… Comer bien, le ayudará a estar sentirse mejor.
- Manteniendo relaciones sociales: La salud emocional se ve reforzada al mantener el contacto con otras personas. Sentirse acompañado y evadir la soledad ayuda a tener la mente ocupada y distraída. El apoyo de otras personas de edad similar con las que pueda disfrutar de conversaciones, paseos, juegos u otro tipo de actividades refuerzan al adulto mayor y pueden evitar la depresión.
- Apoyo de la familia: La presencia de la familia le hará sentirse querido e importante. No olvidemos incluir a nuestro familiar en nuestros planes, ir a visitarle en caso de no vivir con nosotros y pasar tiempo con él. Sentirse valorado y querido le ayudará a levantar el ánimo en una etapa de su vida en la que es más dependiente.
- Realizar actividades: Las manualidades, ejercicios de memoria, juegos… todo tipo de actividades lúdicas que le ayuden a ejercitar la mente y reforzar sus habilidades cognitivas, le ayudarán a desarrollar su creatividad y estado emocional.
Recordemos que, sentirse querido y apoyado es fundamental y muy valorado por las personas mayores en esta etapa de su vida, que es cuando se sienten más solos y vulnerables. Son muchas las causas que pueden desencadenar en una depresión como pueden ser:
- La muerte de su cónyuge o un ser querido cercano
- Padecer algún tipo de enfermedad
- Sentirse sólo
- La falta de actividad después de una larga vida
Un diagnóstico temprano puede ayudar a prevenir las consecuencias tanto físicas como emocionales de una depresión en personas mayores, pero sobre todo, somos las personas que les rodean los que les pueden hacer más agradable a última etapa de su vida. Si bien envejecer es una parte inevitable de la vida, intentemos que la depresión no debe formar parte de ella.